La revelación que saltaba ayer 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, a los informativos, en pleno confinamiento de los españoles y españolas por el coronavirus, de las actividades delictivas del anterior Jefe del Estado, padre del actual, consistente en portear maletines de dinero renegrido a Suiza eludiendo los controles fiscales y aduaneros, constituye sin duda alguna un nuevo Episodio Nacional escandaloso de este personaje sin moralidad alguna, y que sin duda constituye una nueva escenificación de uno de los más conocidos auto sacramentales, “El gran teatro del mundo”, del dramaturgo contra- reformista Calderón de la Barca, que recrea la vida como una especie de escenificación, imaginando al mundo como si fuera un gran teatro tratando de transmitir la idea de que solo a través de la muerte se llega a la verdadera vida, pues en ésta no hay solución.
Traigo a colación tal pieza teatral, para relacionarla con la situación irremediable de España, donde la marcha del expresidente Aznar a su residencia de Marbella, declarado ya el estado de alarma desde Madrid, ese tipo que ya en el año 2007, ante la campaña frente al alcohol en los conductores señaló que quien era la Dirección General de Tráfico para no dejar beber tranquilamente a los conductores; o la realización de ejercicio físico normal y corriente todas las mañanas por parte del expresidente Mariano Rajoy, al que han tenido que sancionar las fuerzas de seguridad; o la clausura de las naves de IFEMA como supuesto hospital para acoger enfermos del coronavirus, por parte del Alcalde de Madrid y la presidenta de la Comunidad de Madrid amontonados como en una manifestación del 1º de Mayo y sin guardar medida de prevención alguna; tipos todos ellos cuya conducta impugna a la gran mayoría de españoles y españolas, que durante ya cerca de dos meses están confinados en sus domicilios
Solo un hazmerreir como Donal Trump y sus consejos de ingerir detergente y lejía para matar el virus en un minuto como única solución para acabar con la pandemia, mientras millones de conciudadanos pierden su empleo, cuando no su vida por falta de atención sanitaria, puede homologarse a este gran teatro del nuestro universo español, donde las preguntas, aunque sean hipotéticas, surgen inmediatamente, os imagináis ¿qué hubiera pasado si esta pandemia nos hubiera cogido con estos personajes en el Gobierno?, alguien puede imaginarse ¿qué habría ocurrido sino hubiera habido un país como China, que aunque sea en condiciones onerosas, nos vende material sanitario para equipar a nuestros profesionales? Os imagináis ¿cómo se hubiera abordado el asunto de los desahucios, de las prestaciones por desempleo, del ingreso mínimo vital para gente sin recursos? Pues si os lo imagináis como yo, aprenderse el cuento, y que éste hampa de malhechores y corruptos no nos vuelva a regentar jamás.
Carlos Canelo, Secretario Regional del PCE en Extremadura.
Mayo 2020
